miércoles, 30 de noviembre de 2011

El superviviente

Max ha venido al mundo entre bambalinas, inesperado, diminuto… una pequeña dosis de amor envuelto en un albornoz de esperanza. Desde su burbuja no podía ver, escuchaba una melodía confundida en la voz de su madre, sentía el sol de Sevilla a través de los poros de una piel aún por definir. Entonces empezó a llover, la lluvia lo trajo... El hijo de la lluvia no podía ausentar el olor a tierra mojada, el almizcle, el azahar de un naranjo que lo esperará unos meses, hasta la primavera, cuando ya será un niño mayor que nació el año pasado, mas uno en el censo.
… su madre, agotada, no pudo retener sus ganas de venir al mundo, intentó en vano sujetar al niño hasta el fin de las lluvias. Su padre condujo hasta parar el tiempo para estar a su lado, para recibirlo entre algodones en un mundo hostil. Pero Max desborda genio y personalidad, pequeño brío, cuántas ganas de vivir… y en todo momento supo que saldría bien, quizás el mundo no estaba preparado para él, pero él estaba preparado para el mundo. Max es una sola sílaba, contundente, definido, un prefijo de grandeza. Max es un superviviente, un soldado, un valor inexplicable forjado en las minas de la naturaleza, un coraje inaudito en un corazón que late ralentizado dentro de un cuerpo de muñeco. Sin embargo, es un latido intenso y ensordecedor, se hace eco en las paredes de la incubadora para decir: ¡eh, aquí estoy yo, hacedme sitio en el presente! Gestado entre dos tierras, Max pertenece a España; es del norte, del centro, y sobre todo del sur, donde la curiosidad lo trajo por la ruta de la Plata, ¡es un jipi!. Por pedigrí cuando crezca será el más salao de su clase, irremediablemente simpático y buena gente. Y siempre podrá decir orgulloso que nació a orillas del Guadalquivir, donde la risa y la música llenan todos los rincones.   
Sin saberlo trae el futuro por escribir bajo el brazo, que aunque ahora es un todo incierto e inconexo, poco a poco irá tejiéndose en torno a su cuerpecito. El niño de trapo trae lo mejor de una vida nueva: TODO POR VIVIR. Bajo el signo de sagitario caminará por las estrellas, y cada 29 de noviembre recordaremos lo que nos hizo rezar a los ateos. ¡Ay, granuja! Qué no te daría yo para ponerte un mes más, unos gramos, una porción de tiempo en tu pequeño espacio. Sin embargo, Max es un superviviente, hará grandes cosas, tiene tanto por hacer que hubo de venir antes al mundo, no podía esperar… lo trajo la lluvia.

Una de canes

Son dos, uno es la viva estampa de Idefix, el pequeño perrito que siempre acompañaba a Obelix en sus aventuras por la Galia. El otro, es un Husky que ha de ser tratado de usted dado el grado de señorío que destila su porte.
Se asoman a la vida desde su jardín, comentan el ajetreo de los "pedestrians", se miran y lo dicen todo, te miran y te los quieres quedar....
El primer dia que pasé estaban los dos muy serios, mirando hacia el exterior sin perderse un detalle. De pronto, me paré a observarlos y me miraron en plan: "nos gustaría taaaaanto dar un paseíto...", y yo me hice fan al instante!
Al día siguiente, había refrescado un poco, supongo que por ello Idefix decidió que lo mejor era arropar a su compañero con su propio cuerpecillo. Era una escena supercómica ya que el pobre no cubría ni un tercio de la grupa del Husky, que aguantaba estoicamente haciéndose el abrigado.
Otro día, Idefix había sido rapado y pensó que mejor sería ponerse a resguardo entre las patas delanteras del Husky. De este modo, y sin moverse ni un ápice, los dos parecían una postal de Hallmark... para comérselos.
Lo mejor es que te miran y sabes que piensan!! El Husky te traspasa con esos profundos ojos azul glaciar, es hipnótico, casi mágico, rozando incluso lo etéreo. Idefix, por su parte, es un gran señor con aire de político, en otra vida podría haber sido presidente de los Estados Unidos.
¡¡Qué pareja, son geniales!!, próximamente habrá fotos para que podáis comprender por qué soy fan.

Los perros de mi vecino

Los perros de mi vecino tienen tanta personalidad que he tenido que crear una pestaña en mi blog para ellos... A partir de hoy, serán los protagonistas de muchos de mis comentarios. Para seguirlo, sólo teneis que pinchar en la pestaña "Los perros de mi vecino" que aparece debajo del título del blog y accederéis.

jueves, 24 de noviembre de 2011

Thanksgiving

Me he sentido como en casa a 5474 km de ella, rodeada de gente que acabo de conocer y que bien podían haber sido amigos de toda la vida. Tres familias, un pavo, un montón de verduras asadas, un relleno vegetariano y otro normal, mashed potatoes, salsa de arándanos, tarta de calabaza, pecan pie... todo home made, y bañado por un vino español que encontré algo lejos de la Rioja... 
Ha sido como estar dentro de una película, en una casa preciosa, enorme, con un montón de gente alrededor de una mesa, compartiendo risas, experiencias, ilusiones... Y cuando ha llegado el momento de dar gracias, uno a uno han ido abriendo su corazón sin importar nada más. Cuando me ha llegado el turno a mí, he dado gracias por esta oportunidad, por haber podido formar parte de un día tan especial, por haber sido una más de una gran familia, por haber tenido la suerte de participar en un ritual tan íntimo y tan sincero. 
Y doy gracias porque yo tengo una familia como esa en España, porque cada día que pasa soy más consciente de lo afortunada que soy por mis hermanos, por mis padres. Cuánto os echo de menos! 

A mi madre le hubiese encantado esta noche, tantas comiditas ricas, tan distinto de lo nuestro. Aquí el trabajo se reparte y cada uno trae su aportación desde casa. Cuando se termina, todos quitamos la mesa y ayudamos a recoger. Luego charlamos un ratito y cada mochuelo a su olivo, que tampoco hay que abusar de la hospitalidad de la gente.
Mi padre disfrutaría sin duda siendo el anfitrión de un acción de gracias, abriendo botellas de vino por aquí y por allá.

Creo que a partir de este año voy a hacer mía esta tradición, que me ha parecido estupenda. 
Aquí os dejo una foto de Eric trinchando el pavo.

Y mañana: a por el Black Friday!!

sábado, 19 de noviembre de 2011

Amigos en Boston

Porque estar lejos de casa une a catalanes y madrileños, porque los españoles somos especiales y nos gusta ser sociables, pese al frío, salir tomar unas cañas con los amigos... Así, en mi primer fin de semana sola en esta ciudad, Leland abre sus puertas para mí. Gracias a la acción de Riesgo, compro una cama y Alicia, Marta, Fito, Edu, Susanna... ya forman parte de mi agenda en T-mobile. Científicos que participan, como yo, del proyecto "fuga de cerebros", y que me han acogido en sus vidas sin importar qué fui antes de llegar aquí. Creo que me va a gustar Boston!

miércoles, 16 de noviembre de 2011

Ardillas...

Esta mañana salí de casa con un paraguas en el bolso. Las predicciones meteorológicas llevaban toda la semana anunciando una lluvia que no llega. Camino con mis cascos, portadores de palabras envueltas en la melodía de mi lengua materna; me transportan a mi España, donde lo más común al salir de casa cada día era adentrarme en un atasco. Madrid tiene ese encanto de las ciudades grandes, llegar al trabajo es una tarea en sí misma. Sevilla, en cambio, sosegada... te espera con un ascofé y media tostá a primera hora de cada mañana, da igual el tiempo que haga.
Cambridge me da los buenos días deslumbrándome, ya que cuando piso la calle hace horas que ha amanecido. Inmersa en mi tarareo, me parece avistar algo por el rabillo del ojo... ¿un gato, quizás? Ay... cuánto echo de menos a mi Loli... Pero no! es una ardilla!! Es de color gris y tiene una cola frondosa. Huye de mí y se esconde detrás de un seto. Se asoma desde allí y me mira con curiosidad (imagino que piensa: otra guiri...). Continuo mi camino con una sonrisa, me caen bien las ardillas. Y unos metros después, otra!! corre a esconderse como la primera, mi sonrisa se ensancha. Hoy llegué más contenta al trabajo.
Al salir, diluviaba!! hoy he aprendido algo: Las ardillas barruntan lluvia.

martes, 8 de noviembre de 2011

Primera compra en un supermercado americano

Llego al super con intención de hacer la primera compra, ésa en la que el gasto es directamente proporcional a la cantidad de cosas que te hacen falta. Sólo que aquí crece exponencialmente cuando se trata de comprar aceite de oliva, jamón serrano (ah no, que jamón no hay :-(, aqui tiene que ser york...). Y la incursión comienza con la búsqueda de galletas normales: oreo double staff, chip ahoy chewy, galletas de lo que quieras, y allí olvidadas, en el estante más recóndito: mis sencillas e inigualables: GALLETAS MARÍA!!
Por otro lado, descubro que Jack Daniel´s hace salsas!! y que aquí todo es de tamaño XXL, atención al yogurt natural de litro (la cuchara de la derecha es sopera)!!!



domingo, 6 de noviembre de 2011

Expedición a IKEA

Alquiler de un coche americano: $100, sacar la dirección de Ikea de Google maps: $0, comprar lo más grande en Ikea para amueblar la casa: $1300, meter todo eso en un coche de 4 puertas... no tiene precio!!
Una señora americana muy amable se ofrece con unas cuerdas para amarrar el colchón al techo del vehículo. Gracias a ella, hoy tengo una cama donde dormir. America is different!!

sábado, 5 de noviembre de 2011

¿Es un barco? ¿Es un coche? NO!!! Pero no se que es...

La mandíbula me tocaba el suelo cuando vi esto por las calles de Boston:


 Ahora, que loco me quedé cuando lo vi navegar como tal cosa...


Flipa!!!! aquí te haces un coche con un Barco y te permiten circular!!!

Ahora que para pasote pasote, el Autobús de Otto!


jueves, 3 de noviembre de 2011

Adiós Madrid...

Despegué en Madrid, la tierra donde nací, donde somos más chulos que nadie y donde comemos cocido y bocatas de calamares...
Aterricé en Boston, con una diferencia horaria de 6 horas en meridianos y un abismo en posibilidades de futuro. Harvard me esperaba con los brazos abiertos.
En la maleta traía ropa de abrigo que no sería suficiente, unas pocas fotos de la familia y los amigos que quedaron atrás expectantes... pero sobre todo traía ilusiones y un sueño por cumplir: el sueño americano!!